viernes, 23 de noviembre de 2007

EL MUTISMO DE LA SODA O LA VIGENCIA FORZADA EN CERATI

Recientemente se ha hablado de esto. Y yo no me podia quedar atras...

Para hablar del re-encuentro de soda stereo se tiene que hacer una retrospectiva de una formación y despedida del mismo y de cómo desemboca en un estrepitoso desenlace de bienvenida en el 2007.

Para los nacidos en los 90´s ( ahora chicuelos critican lo que escuchan, a veces...) seguramente pensaron “ Quién es Soda Stereo “. Una razón muy sencilla quizá sea el mutismo de la banda de manera indirecta. Independientemente de ello, cuando escuchan entre los integrantes a Gustavo Cerati recae la vigencia y respetabilidad musical, se reconforta el sentido de “lo novedoso” a lo “antiguo y quizá pasable”.

Thom Yorke, el líder del grupo Radiohead, decidió grabar un disco como solista. ¿Por qué? ¿En qué momento ocurrió si se encontraban de gira y trabajando? Es simple. Cuando se dio cuenta de que estaba acumulando piezas que “difícilmente se puede imaginar tocadas por su banda” dan como resultado Erased.

Cerati seguramente tuvo esa misma necesidad, tanto en una visión retrospectiva en el sistema de exteriorizar sentimientos más íntimos y personales, puntos de vista infinitamente particulares, donde una banda (al parecer) le estorbaba. ¿Es eso acaso el crecimiento personal? No. Es la base de la experimentación y del discreto orden por conocer nuevos eventos que satisfacen al alma.

La definición de banda o grupo musical esta bien entendida: son un conjunto de personas con intereses comunes que pretenden crear música (o eso entiendo) llevados por un deseo y necesidad expresivos.

Desde el principio Cerati ha sido el centro del grupo (no solo porque aporta la voz y la imagen emblemática, es el compositor y letrista principal). Pero con el tiempo (y dejándonos llevar por los estereotipos argentinos) empezaron a tener roces. Y era evidente, no solo por acaparar la atención o tener mejor voz y voto en la agrupación, sino porque como en los Beatles comenzaron a hacerse evidentes las costuras.

Lamentablemente (y el tiempo da la razón) Cerati nunca logró sacudirse la pesada carga de haber pertenecido a Soda y no porque halla sido “El gran grupo de rock”, pero por lo menos y bajo las circunstancias, fue un grupo de creación que abre las nuevas tendencias latinas hacia lo que parecía algo impensable: el rock en español. Pero sigue la pregunta en pie: ¿Es justo complacer a los que se paseaban rumiando un re-encuentro? O es que... ¿Con dinero baila el perro? Lo cierto es que bajo la cúspide de los re-encuentros, ¡en México estamos hartos! (algunos). Implacablemente eso no deja de ser por supuesto un mutis publicitario: lo que fue era, lo que es... quizá será. Nos tienen levantados de cejas, porque es un grupo envejecido... queremos algo “refrescante y burbujeante” Any way. Habrá que esperar a cuantas señoritas al pie de un ahuehuete centenario llorarán y suspiraran. ( aunque... como vamos, no solo son señoritas, verdad Carlitos??)

miércoles, 7 de noviembre de 2007

No se me ocurre ningún titulo para este asunto

En la gloria esta el placer y el placer esta en tu piel.Absurdamente enamorada de Bukowski,me hubiera acostado con él por lástima



Me estoy cansado de todo lo q hay en mi cabeza. Me siento impertinentemente aburrida de todo lo que pasa por ahi. Estoy hasta la madre de pensarte, de quererte, de extrañarte, de sentir q las cosas no estan completas si no llegas para cerrarme el día.
Sinceramente no esperaría q volvieras a pararte frente a mi. Un beso y yo querdaría perdida en un limbo irreversiblemente.
Ojos miel, tristes hojas,
vida q nos estalla en la cara,
momentos infelices q nos recobrana una sonrisa radiante,
chispitas de tiempo, que me tienen en una esfera,


Espero q no me esperes demasiado. Tengo tantas ganas de no llegar, el trafico esta ligero, el auto encendio a la primera, encontre la blusa morada q tenia en mente, las lineas de los ojos se formaron sin hacer preguntas de manera perfecta, el rimel no me tiro las pestañas, los tacones no me molestan, y sin embargo, quiero alargar lo inevitable.

Si, es imposible que deje de mirarme con lascididad, pero a estas alturas ya es demasiado tarde para mandarlo todo al carjo y esperar un poco de recato. Acepte este empleo por dos razones: el dinero y el reconocimiento general de mi persona. Pero al parecer, nada suena como lo habia planeado, esto es una basura.

Me he pasado horas viendo ese programa. Sin embargo no puedo apartar de mi mente la imagen de Roberto rompiendo conmigo.
-Estamos cansados uno del otro. Necesito un respiro, y tu más.
-Pero yo no me canso de ti.
-Eso crees, pero a la larga me lo vas a agradecer.
Sigo estatica. Mis lagrimas se acoplan a la regularidad. Mi café es ahora amargo y diluído. Y la sal me quema las mejillas. Han pasado dos dias. Estoy que me carga el diablo. Todo me sale mal. Ha sido una semana terrible. ¿Porque es tan fácil acostumbrarse al respiro de una persona en la sien al despertar? ¿Por qué es tan dificil olvidar un beso espontaneo, una caricia solemne, un abraso apasionado?

Sigo en ese lapsus brutus. Una confusión invade lo más profundo de mi ser y me llena de dudas tangibles que duelen en lo más ardiente de mi cuerpo. Me he convencido, y lo acepto como una opción de felicidad indescriptible. Me escuchas? Abandono todo cuanto ame, todo cuanto desee, cuanto anhele y a lo que pretendí pertenecer. Hoy a tres años de perder lo que me quedaba de alma en una terrible penitencia fútil y amarga, te confieso que te dejo por miles de estrellas para colmarme de un laberinto más cómodo y embriagante! El amor que alguna vez te entregue entero y por convicción hoy se convierte en una pálida sombra de mis más puras pretensiones: Salvar el orgullo me parece más importante. Y yo te amaba. Andaba como aliento que lleva el diablo. Me mordía las uñas y esperaba lo más sutil de tus encantos en la fragancia más fugaz a que volvieras para decirme un te quiero. La gente sigue haciendo preguntas. El entendimiento es lo menos importante y el morbo es el móvil causal más entretenido. Te he llorado como nunca lo hice con nadie (si es que lo hice, no recuerdo ahora ninguno tan amargo). A los hombres les gustan las lesbianas. Evocan su más tristes porquerías cada q nos ven por la calle dándonos un beso apasionado. Ella me besa por la sensación del público.



Hace tanto tiempo q no veo el mar. Hace tanto q no dejo de pensar en tus emociones suspendidas en mi rostro. Los besos, las necesidades, el amor, todo en un conjunto de cosas q simplemente hacen de mi una necesidad casi pedante y agresiva


Las imperfecciones no dejan q sienta mi piel como antes. El tiempo esta pasando demasiado aprisa y simplemente no se q hacer con este asco por la vida y sus bemoles tan marcados. Siempre espere lo mejor a los 23, a los 24, pero en un momento me vi transportada a los 30 sin éxito y sin ganas,


Le dije que posará, me encantaba hacerle fotos a cualquier hora, pero no quería confesarlo. He vivido mucho tiempo al margen de cualquier emoción, pero este es un sujeto especial. Le dije “sonrie” y me dedico la más brillante y alegre risa ronca que parecía venir de su ser más profundo.

Se acerco hacia mi. Ese día tenía la camara instantanea. No podía apartas mis ojos de lo q acababa de salir. Me dijo “ que tal salí”, puse la cara seria y con burla le espete “como siempre… saliste horrible”. Esta vez me regalo una sonora carcajada.Voy a quedarmelas, no quiero q el mundo crea q mis modelos son mediocres. Que bien, sonrio. Me agradaba que comprendiera mi sarcasmo y le divirtiera, a la mayoría de la gente le molesta mi insolencia. Me tomo de la mano y caminamos juntos así por largo rato. No recuerdo nada re-elevante después de la despedida en ese día.

Era un apodo q opte por decirle “el feo”. Él sabía, por supuesto, q tenía un rostro interesante, quizá no era un tipo apuesto convencional, pero poseía una fuerza viril y enigmatica que sin lugar a dudas robaba suspiros. Sus fotografías junto con las demás fueron el tema central de mi exposición. Las chicas iban y venían preguntando a que hora el modelo iba a hacer acto de prescencia. Yo sabía q no vendría porque detesta las multitudes, pero cuando lo ví entrando a la inaguraciçón de mi exposición a 3 horas de haber comenzado exerimente un gusto casi adolescente. Me sudaban las manos. En realidad se veía muy apuesto: traje, corbata, cabello humedo y peinado, recién afeitado. Nunca lo había visto sin su inmaculada barba, eso lo hacía ser un rebelde consumado. Hasta ahora seguía sin saber a ciencia cierta a que se dedicaba, pero definitivamente era un contrincante formidable en cualquier cosa que él deseara desempeñar, por eso, al verlo entrar de manera formal, pensé que su inteligencia era su mejor arma. No miró ningua de las fotos. En el momento en que clavo sus ojos en mi fue directamente y me dio un beso en la mejilla. Su olor me embriagaba. Permanecí con la mascara de indiferencia, pero ante todo, no pude evitar sonreírle con agradecimiento. “te ves hermosa”. Me alegré. “Hagas lo que hagas, sigues pareciendome horrendo”. Las mujeres empezaron a rodearlo. Preguntas que a mi me encataría saber, pero decidí q me veía ridicula a la expectativa de que el las contestara todas. Me retire rapidamente de ahí. Estoy segura q no notó mi ausencia.

Este Abril pinta muy duro. Entre la escuela, mi empleo mediocre en el supermercado y la fotografía se me consume la vida. No he querido verlo. Me llamo ayer y me dejo unos cuantos mensajes en el celular. No he sabido mucho de él después de eso. Obvio, para q aburrise y molestarse con una niña como yo. Sigo distraída y eso casi me cuesta el empleo. Le dí de más a un cliente y ahora no sólo se redujo mi salario, sino q además debo pagarlo con un poco de tiempo extra.
-Son 70.50, ¿desea redondear?- Pregunto sin mirar.
-Si, con la condición de que salgas conmigo al cine mañana que es tu día libre- Levanto la vista y sus ojos brillantes, su barba espesa me matan.
-Ok.

Cada minuto después de que me toca es como perderme en un abismo de veneno y miel. Me siento embriagada por mis propias emociones, por sus besos, porque es tan coordinada la necesidad de su boca en la mía. Siento q reviento, pero eso me da miedo. Soy tan vulnerable como una burbuja, tan maleable como el metal, me siento un trozo de azucar q se disuelve en el café.







Tan fria, e impersonal. Tenia tantas ganas de deshacerle el peinado con las manos y darle color a sus mejillas, pero definitivamente no podía.. había demasiado público.



No me toca decidir por ti ni por nadie. Me gusta la diversidad de nuestros encuentros. Sexo, sexo. Todo entre nosotros se basa en eso. Somos una pareja normal con necesidades comodas, con intenciones de proporcionarnos placer hasta que la vida nos alzance y nos de una bofetada de realidad.
“Estoy tan cansado de la vida. Me aburro entre mis penas terrenales. Siento que hay algo más pero no sé donde buscarlos. Quizá sea algo menos indómito, no sé, últimamente creo q me he vuelto estúpido y que me comprometo con la realidad. Me repugna”.

Michael conduce largo rato sin saber que rumbo tomar. Lo hace por una inercia desquiciante, casi perdida en todo sentido, pero sabe que lo que busca esta entre esa mierda. Solo hay q saber donde hacerlo.

Se detiene, es tarde. Mira su reloj pulsera: 04:50. Tan tarde como para incorporarse del asiento y descansar un poco las piernas. La gasolina esta agotándose. Hay un bar-café subterráneo. Los suburbios contrastan con ese pequeño lugar… entra sintiendo curiosidad, temerariamente, sin tener la conciencia del peligro de la calle o de las nociones establecidas por la precaución.

El café olía a hierba, mezclado con un olor a novedad y a un reconfortante secreto. Había música de jazz. Algo q contrastaba con la fachada del lugar. Adentro solo había una pareja de bohemios clamando poesía a un auditorio pequeño de 6 personas. Al fondo, cubierta por una oscuridad intrigante hay un ser humano. Se acerca suavemente, esta debajo de las escaleras, lo que le da un aire de misterio y de extrañeza. Se acerca. Es mujer y pinta. Mueve ágilmente las manos. Parece no derramar la pintura para nada, como si de pronto todo se materializara de repente mientras las pinceladas son precisas y cada una con un fin único de creación que lo deja pasmado. No es posible que exista tanta precisión en algo tan subjetivo. La mujer pinta a un hombre que esta ebrio en una de las mesas. Tiene sombrero de ala ancha y esta inconciente. Es un ser humano común y corriente, pero de alguna manera, aunque es el mismo sujeto y las mismas circunstancias, los mismos colores, se ve tan vivo y real, que… al parecer mejora al modelo original, lo recubre de un misterio y una fascinación desquiciante, que ni el mismo modelo sería conciente de comprender o de manifestar. Esta maravillado. Ella lava los pinceles. Los colores se expanden en el disolvente mientras ella ligeramente firma con un pincel más delgado. “Yaqui DuBois”. La mira largo rato. Sus facciones son las de una persona normal, pero sin duda con un toque diferentes. Solo si se le mira con atención se es conciente de que hay algo más q una sencillez demencial. Es tan común, pero a la vez tan… diferente. Ella sigue en su trabajo, al parecer no es conciente de la presencia de él. La mira extrañado. Él, un junior acostumbrado a la atención en general, es ignorado como si fuera nada. Pudo darse la vuelta e irse. Se vio tentado por su orgullo y vanidad heridos. Pero estaba hipnotizado ante la magia de la creación excelsa y el placer de lo cotidiano. Al fin ella levanto la vista y pudo ver un par de ojos castaños. Q raro. Rasgos hispanos, ojos grandes y expresivos, nariz quebrada, labios carnosos y sin expresión. Usa gafas. Es una mujer no muy alta, con cabello negro atado en una coleta a la nuca, una camisa blanca impecable libre de restos de pintura, un pantalón negro y zapatos de lona. Era una mujer tangible, humana, demasiado. Pero a la vez como si fuera a desaparecer en cualquier momento. Ella sonrió. Lo hizo en una mueca, parecía con ello decir algo que él no pudo comprender. Pero duro tan poco el contacto visual, ahora estaba más desconcertado. Se acerco simplemente, atraído como por un imán. Se aferro a lo que sucedía. Admiro el cuadro largo rato. En el decía algo, como si de repente las letras se hubiesen materializado antes sus ojos… “un mundo de extraños…”. Por fin pudo despegar los ojos del cuadro y busco a la autora, pero esta había desaparecido. La busco largo rato por el lugar, y nada. Entonces, con un acopio de voluntad tremendo, tomo el cuadro que al parecer estaba seco y se lo llevo. “Yaqui… Du… Bois… ¿quién eres?”. Subió las escaleras. Entró a su auto, pero de repente una pandilla de adolescentes lo embistió… inofensivos o no, le hicieron mucho daño. El cuadro parecía intacto, pero su auto y sus pertenecías había desaparecido y se dejo arrastrar por el hermoso suspiro de la inconciencia.

Cuando abrió los ojos seguía desorientado. Estaba en la calle solo y la luz del día le quemaba la cara. Se levanto con un esfuerzo sobre humano y se dirigió al café. Estaba cerrado. Un café nocturno, pensó con ironía. Toco una vez y un hombre de barba gris le sonrió. “sube al cuarto 11” y le indico el camino. Arriba del café había un pequeño hotel. Sus habitantes parecían personas solitarias e insípidas. Se sento frente al numero 11. No intento abrir el picaporte. Estaba muy cansado par ahacerlo. Se dejo caer como un muerto y recargo su espalda a la pared. Se dejo perder de nuevo. Al abrir los ojos aún había luz. Pero era palida y casi desaparecia. Estaba recostado en un cuarto pequeño, impregnado de olor a café y cigarro, humedad y tiempo. Se sintió terriblemente cómodo. Nada importaba mucho. Ni los golpes. Se sentía terriblemente aliviado. Se levanto con dificultad y busco por todas partes a algun ser q puedise explicar su estancia en ese lugar. Una taza de café recién hecha estaba a su lado, como si estuviera esperando a que el despertara para tener la temperatura adecuada. Se rió de sus pensamientos. La bebío con un placer infinito. Se dejo envolver por la sutileza del grano. Recorrio el lugar brevemente. Abrió un closet al final y encontró algo q lo dejó atonito. Pinturas. Muchas, demasiadas. Todas con la viveza y realidad de un instante que se suspende entre el tiempo y que es captado por un observador imparcial, haciendonos participes de ese momento. Dejo caer los brazos a los costados… y levanto uno para tocar cada uno. “Emula un acontecimiento en tu vida… ahí esta para ser concedido” y ahí estaba un hermoso lago con los reflejos del atardecer (o amanecer) filtrandose por las aguas y las montañas, con una tilde de ciudad que poroducía un estado de melancolia tal que tuvo que dejarlo para no setirse asi. Asi cada uno evocaba un momento. Y ahí estaba, su sueño. Un boceto pequeño donde había un enorme pasillo de ladrillos rojos al fondo con un pequeña bombilla que alumbraba el pasillo pero hacía más oscura la puerta del fondo. “cruzarás en el momento mismo en que sepas que quieres cruzar”. No entendia, pero ahí estaba, vivo… y real. Plasmado con la delicadeza de un sueño, pero con la firmeza de algo verdaderamente real.

Ella entro silenciosamente. Lo miró un momento. El seguía en si mismo, no era conciente de nada. Ella entro a la cocina y se sirvio un poco de café. Escucho el sonido y se acerco sin decir nada. Ella tampoc decía nada, pero al parecer no era necesario. Al fin, sin aguantar más la presión del alma, el dijo “Es mío?”. Ella sonrio asientiendo. El lo tomo con ambas manos para visualizarlo mejor. Cada detalle, cada cosa q no recordaba hasta q sucedia cada noche estaba ahí. “Me llamo…”. Ella se levanto y dijo a prisa “No me interesa como te llamas… tal vez ya sé quién eres, pero no necesito tu nombre hasta q realmente sepas cual será”. No entendió mucho. Era como si hubiese un significado muy profundo en esa frase y el no estaba lo suficientemente preparado para entender con claridad nada. “café?”. Ambos bebieron silenciosamente, entre ellos había una cordialidad que solo existe entre los amigos más viejos. Ella lo miraba. El sentía como si la conociera de toda la vida. Habia en sus ojos la tremenda decisión de haberla visto antes. Ella estaba seria de pronto. El fruncio el ceño también. “tu me conoces?” dijo inseguro. “Si. Has venido porque era el momento de que lo hicieras”. Se rio mucho. Ese hecho era casualidad y ella creía que era algo soprendendente. Q sucedía?

intromision III

Para poder entenderte me he perdido en la locura. Dices bien que la indiferencia mezclada con

-¿Que tan profundas son tus penas? ¿Que esperas de ellas?... duelen... me gustan y me desesperan... me matan cada día, pero... ¿y a ti como te afectan?
-No si uno sabe meterlas en lo más profundo del pensamiento donde permanecen mucho tiempo sin incomodar al que las carga...


Irreversiblemente me he enamorado del perfume y las cruces sembradas en tus palmas, pienso en tu terciopelo y releo tu boca de luz. Gracias por venir a la cita. 20 jun 05 312pm
La luna me confesó un secreto mistico... la escuchas? Dice que te pertenezco en todas mis formas ancestrales, oh mi prodigioso marido!, besos con sabor a terquedad.
Un languido segundo separa las bocas de la niña y del caballo que porta ese sonoro carrusel. Las bocas dentro de poco se besaran hasta partirse los labios. Muaaa.21 jun 05 1019pm
Miren en la historia: a lo largo del tiempo las constelaciones han llevado tu nombre, los ciclones, maremotos, los grifos de que provienen los dulces sueños.21 jun 05 1102pm
De modo que despertarse contigo es que el agua hierva, el vapor hable y del champu salgan tus quereres. Has hecho de la mañana una fiesta de espuma. Mil besos.22 jun 05 844am
Debo decirte que entre los dos, probablemente se interponga un idillo de tus dientes y yo. No te exaltes si alguna vez me enredo con ellos, antes que contigo.22 jun 05 518pm
A los violetas peces les gusta el agua de jamaica para nadar, el aliento a durazno y los vestidos cortos de espuma para salir a filtear con las mariposas.23 jun 05 558 PM
Una canción: hoy estas esplendida. Y que todo lo iluminas. Demos un paseo: vuelta por el universo, pide algún deseo.24 jun 05 915am
Solo queda tiempo de jugar gato contigo hasta decolorar la sombra de los lápices que tuercen tu memoria. ¿Soy esa agitación que sufres al distraerte con pesadillas?2 jul 05 532 PM
Muchas abejas convencidas del mar abierto en que floreces. Muchas abejas convencidas de que solo hay que esperar toda la vida.2 jul 922 PM
Muchas abejas consideran que tus pupilas son mesas de juego donde fluye la suerte. Muchas abejas consideran que tenerte es tocar un milagro.3 jul 855pm
Quiero tener un hijo tuyo, de esa sangre ennegrecida que corra por mi vientre y que abuse de mí, que se alimente, beba y harte de mi cuerpo, quiero tener solo un poco de ti.
Gemelas amor. Tengamos gemelas con nombres de brujas y días perfumados. Dos hijas cuya simetría hable de tu lado hechizado.8 jul 1130pm
Despiértame mañana con ese proceso santo de ti en ropa interior. Con la suerte de un desayuno cercano al canibalismo. Asegúrame mañana al oído que tu eres el sol.8 jul 11 45pm
Al lado del siniestro acontece el parpadeo. Se lo que es vivir de tu beso y se del hambre y sus agujas que señalan tu distancia. Quédate a dormir esta noche,
Tú sabes muchas cosas. Tú puedes darme una respuesta. Tú sabes todo. ¿Por que estamos tan lejos justo hoy que quiero darte mis ojos?.Un descuido en las presentaciones formales: por supuesto que mueres, desde luego habrá sangre y morfina. Juego turista en tu medula. Yo soy tu agua. Yo soy el cáncer.
De dos en dos como tulipanes de supermercado. besos, flechas, manta rayas, silbidos formados por conseguir primera fila para ver la electricidad jugando entre tus dedos.12 jul 10 50 a.m.
Mis olas, mis ramos de flores y canastos de necesidad por ti. Globos de deseo. Besos que sabrán a pan. Mis parpados oscurecidos que recuerdan tus senos. Todos te lo doy. 12 jul 01 1137am
Cántame un arrullo. Quiero un evanecer al escucharte decir la palabra Aliento y que me aspires en tu té. Tengo primera fila para esta tarde, que se me va la vida. 12 jul 05 0621pm
Te doy lo único en mi que tiene sentido. Te doy mis fuerzas. te doy lo que conozco sobre las nubes. Te doy el tornasol de los diamantes. Te doy mis ojos. 13 jul 05 10 31pm


¿Fue culpa mía que me fumigaras?, tal vez tenías intenciones nobles, dímelas, me sentiré un poco menos mártir, te deseo todo, si no lo sabes estas mintiendo.

intromision II

La búsqueda la felicidad nos ha llevado a lugares recónditos de auto conocimiento. Uno podría pensar que mas allá de padecer el insomnio de la locura que genera el no encontrarla... nos otorga un leve vestigio de siniestra terquedad. Me agradaría olvidarme de los falsos acontecimientos que siguen a mi derrota amorosa. El querer no siempre significa ser correspondido. El amor es egoísta. Pretende lo que el otro no es capaz de ofrecer: o es mayor o menor; jamás es igualitario. Nunca veremos a un ser amar de la misma manera al otro, porque la misma naturaleza del ser humano es la que complica su emoción. Así como el dolor. El dolor puede ser intenso o suave, depende siempre del estado de ánimo, la percepción del dolor, la capacidad de resistencia y la voluntad corporal que se posea para perder un poco. Siempre es importante conocer al amar. Amar es una actividad extrema, porque genera conflicto interno. El ser humano así le designa. El conflicto precede a una lucha desde el momento mismo en que se desea y añora algo. Algunos se deciden por coartadas fáciles dejando escapar al amor con la premisa "Si regresa es tuyo, si no nuca lo fue" (en mi opinión, es una opción madura que designa el proyecto evolutivo de que la correspondencia depende del otro, y es verdad); la siguiente coartada persevera en la naturaleza posesiva, el desear y el poseer lo rigen, en ella engloba el chantaje, la zozobra, los celos, el incidente que permite continuar proclive al amor o de plano zanjarlo de la existencia para siempre.

Intromision

La huella se plasma en mis latidos. Corre en una oscuridad desquiciada, obsena y tágica. Creo en la firmeza de mis pasos y de que en mis pensamientos un fantasma habra de condernarme. Por favor queridisima existencia, viento que me roba la carne y el tiempo malevolo lleno de verdad. La condición a la que me encomiendo es tan sagrada como la espera silenciosa. Mi corazoón te es mostrado en una libre elección.

Anabel dormitaba placidamente cuando un sonido extraño la desperto. La puerta. Lamentos de un genero femenino. El ssoplo del viento y se tomo alguin tiempo para pensar lo que ocurre. Las ideas fluyen con celeridad cuabndo uno se esta enloqueciendo. Algunas veces no es necesario pensar en lo mucho que se ha perdido la razon para verdaderamente creer q

ella se acerco lentamente. Yo la deje q lo hiciera porque no vi ningun indicio de que hiciera mal a mi integridad.

No siempre es como lo pensamos. Me miro, tenía esa expresión triste y decepcionada que las mujres portamos cuando estamos enamoradas y mal correspondidas.

Yo lo sabía. Y sabía que ella lo sabía.

Él me uso. Me uso para dañarla y me siento culpable. Culpable de quererlo mucho, pero de una manera muy diferente a la de ella.

He buscado siempre el amor y sigo errando el camino. Pero nunca es él. Nunca es la persona adecuada. Jamás. Cómo si algo me impidera buscarlo sin necesidad de romperme en mil trozos. Soy tan


En el momento mismo. Como decirlo. No se distinguir entre besos y raices. No se distinguir lo complicado de lo simple. Y ahora estas en mi lista de promesas a olvidar

quite time

Me gustaría no haberlo descubierto de una forma tan dramatica. mientras ella me besaba era impredecible q me pareciera bonito. Pero sus besos se han vuelto cada vez más exigentes.
Siempre era tan sensual su sonrisa q un día simplemente no pude y me deje llevar.
Para ese enconces yo cursaba emi tultimo año en esa escuelita de mierda. Pero siempre fue un poco más preciso pertenecer all periodico escolar para saber que información se desitlaba por esos rumbos. Despiadados sin ninguna compasiva. Creo que dehaber sido un poco más ingenua con el espiritú, no hubiese aguantado los últimos meses de esta mierda.

No creo q la escuela hubiese sido más aburrida, pero ese suceso me cambio un poco la vida


Tantas cosas en esta vida q a uno tartminan poir destrozarle el ánimo. Sin trabajo, al borde de una desesperación casi homicida, hace q me lleguen a la cabeza 5 años desperdiciados por la misma idiotez. La escuela me mantuvo en el hilo y me destrozo la autoestima.


"Encuentro con el famoso poeta" De "You Get So Alone At Times That It Just Makes Sense."
Encuentro con el famoso poeta.
aquel poeta habia sido famoso y despues de unas decadas de oscuridad tuve suerte y aquel poeta parecio interesarse y me pidio que fuera a su apartamento en la playa. el era homosexual y yo heterosexual, y lo que es peor, joven y lozano.
Llegue, eche una mirada y declame (Como si no lo supiera), "Hey! Donde cojones estan las tias?"
el simplemente sonrio y se toco su mostacho.
Tenia pequeñas lechugas y delicados quesos y otras exquiciteses en la nevera. "donde guardas la jodida cerveza, tio?" Le pregunte.
no importaba, yo habia traido mis propias botellas y empece con ellas.
comenzo a parecer alarmado: "He oido sobre tu brutalidad, por favor desiste de ella!"
me apalanque en su cama, erupte: "ah, mierda nena, no voy a hacerte daño! ha, ha, ha!"
"eres un excelente escritor," dijo el, "pero como persona eres extremadamente despreciable"
"eso es lo que mas me gusta de mi, nena!" continue sirviendome bebida
en seguida parecio desvanecerse tras unas puertas correderas de madera.
"eh nena, sal de ahi! no te voy a hacer nada malo! podemos sentarnos y hablar sobre esa estupida mierda literaria toda la noche! no te embrutecere, mierda, lo prometo!"
"no te creo!," dijo una vocecita
bien, no podia hacer nada sino seguir bebiendo, estaba demasiado borracho para conducir a casa.
cuando me desperte por la mañana, el estaba de pie inclinado sobre mi sonriendo.
"uh," dije, "hola..."
"decias en serio lo que me dijiste la pasada noche? pregunto el.
"ah, el que?"
"abri las puertas y me estuve ahi de pie y tu me viste y dijiste que parecia que yo estuviera surcando el mar en la proa de un gran barco... dijiste que parecia un escandinavo! es cierto?"
"oh, si, si, lo parecias..."
me preparo te caliente con tostadas y me lo zampe.
"bien," dije, ha sido estupendo conocerte..."
"estoy seguro," contesto el.
la puerta se cerro detras mio y encontre el ascensor para bajar y despues de vagabundear un poco por la playa, encontre mi coche, subi, y me fui en lo que parecian ser terminos agradables entre el famoso poeta y yo
pero no era asi:
el empezo a escribir material increiblemente odioso sobre mi y yo dirigi mis disparos hacia el.
todo el asunto fue mas o menos como la mayoria de encuentros de otros escritores
y de todos modos esa parte sobre que le llame escandinavo no era cierta en absoluto: Le llame vikingo
y tampoco es cierto que sin su ayuda yo nunca hubiera aparecido en la Penguin Collection of Modern Poets junto a el y quien era?
ah, si: Lamantia.
"Tregua" De "War all the time (Poems 1981-1984)."
Tregua.
Necesito pasear por la cera en algun sitio en una umbria tarde encontrar una mesa en la terraza de un cafe sentarme pedir una copa y quiero sentarme alli con esa copa y quiero que una mosca aterrice en esa mesa.
entonces quiero ver una mujer pasar caminando en un vestido verde. quiero ver pasar un perro gordo con pelo corto y marron y ojos sonrientes.
quiero morir sentado alli. quiero morir derecho mis ojos todavia abiertos.
quiero que un avion pase volando en lo alto.
quiero que pase una mujer en un vestido azul. entonces quiero que ese mismo perro con pelo corto y marron y ojos sonrientes pase caminando de nuevo. eso sera suficiente despues de todas las otras cosas y de todo lo demas.

carta incandescente

Juro que todo comenzo cuando bajaba por un amplio terraplen, absorvido por el oscuro rio, que se perdia en la inmensidad de la noche; juraria que por su quietud era un abismo secreto.La luna jugaba a las escondidas y la ausencia completa de luz me hizo temblar el maxilar, agravada las circustancias por el hecho de que mi anatomia caia enloquecida cada vez mas hacia "El".Llega un momento, vio, cuando uno sigue cuesta abajo que el limite entre la tierra firme y el abismo se confunden, pues, siempre uno termina saliendo a manotazos de ahogado o tirando de sus propios cabellos, como cuenta una vieja leyenda alemana.Me sente junto a un arbol y cerre los ojos para endulzarme con la melodia melancolica del silencia, profeta de la verdad.Pense sobre dos o tres idioteces de la vida, por ejemplo de porque las uñas siguen creciendo a pesar de que la carne se descompone, o, sobre porque ese viejo amigo se suicido en silencio, que gran determinacion, ¿no?. Y tambien sobre la tragedia... ja! o sea, sobre mi vida.Este ultimo pensamiento fue, quiza, el mas productivo.En-si, mi vida, estaba dominada por la tragedia, o por la rutina... que de cierto modo representa una condena eterna.Lo mas problematico de esto es que no encontraba la forma de salir de el, ¿entiende?... ahora si la encontre... no se sorprenda... dejeme terminar.Estaba maniatado porque mi corazon la deseaba, eso es costumbre y en ese sentido somos animales puros. Le decia que la necesitaba; masticaba, mi corazon, deseosa de mas, y esa necesidad glotona estaba en medio de un festin.Recuerdo que escuadriñe mis bolsillos, hasta que finalmente encontre la navaja que, simplemente por azar, me habia regalado mi mejor enemigo, y cortandome suavemente talle mi nombre sobre mi brazo... y debo decirle que nombrare nuevamente al azar o a su prima la suerte para decirle que todabia tengo la cicatriz que no ha cerrado, ¿ve?; azar o suerte digo porque hace tres años ocurrio este relato.Si usted viera que poca sangre salia, pero cuanto ensuciaba... ja! ja!... perdon la risa.Luego arroje la navaja al rio, y comenzo la revelacion, el sonido que "roto" que produjo me engatuzo, pero logre perderme en otras ideas.Usted sabra, o sinceramente pudo haberse tomado el trabajo de averiguar mi historia; Soy un hombre preparado, que siempre fue recto, inquebrantable, no elastico, no piense mal.Lo unico que pudo conmigo fue que la rutina se desvio hacia la traicion. No mi perro me festejaba al llegar, el reloj no queria darme la hora, todos los semaforos siempre estaban en verde cuando queria atravesar la calle.Siempre fui docil con mi pareja y hasta la acariciaba o besaba con sentido, pero ahora el rio me mostraba una nueva realidad, la cruda y a priori.Sabe usted que ahi, en el fondo del rio se puede encontrar la creacion misma; revalsaria el rio, usted, con sus lagrimas si viera lo que le estoy revelando. De un momento a otro un pez salto y nuevamente el rio me llamo, me quite la camisa y limpie mi brazo que ardia un poquito, quiza por la breve brisa, quiza porque levantaba polvo invisible.Tire la camisa al agua y me sorprendio ver que existia una fuerte correntada; habria jurado que parecia estancada el agua. Quise tirarme al rio, pero otra melodia me absorbio y me lanzo directamente a "Él".Era el viento que se colaba entre las hojas haciendolas vibrar y si usted escuchara lo que estas decian:"Sh! silencio del almaSh! silencio al tiempoSh! criminal sh! el trompo llamaSh! el trompo aturde sh!".Que lirica.Pero vio usted lo terrible y enigmatico que es el tiempo, es puro azar corre como el rio impaciente y ciego arrastra todo lo que puede y lo que no lo corroe hasta destruirlo. Por eso hay espiritus que son arrastrados y otros destruidos, devorados poco a poco, por el manantial interminable.Pero "Èl" seguia llamandome, ahora, golpeteando contra la costa una y otra vez como un reloj que hace:"Tic-Tac! el tiempo pasa Tic-Tac!"Me desnude, pues mi mente estaba preparada (entiende?), tome una piedra pesada y con una soga que habia robado, la ate a mi pie y comenze a ingresar en o por "Èl". Hasta que el agua me llego al cuello en ese momento con calma, busque una caida abruptada, una "barranca-pique" y solte la piedra... Y el me tiro de los pies hundiendome en su realidad, me hundia y escuchaba voces lejanas y mojadas.Comenze a ver la realidad de la creacion de la que antes le hable, Ay! si... Una galeria exepcional de recuerdos inmediatos de sabores solidos y pasajeros al mismo tiempoo, mi mama cocinando, el olor a pobreza, mi padre castigandome duramente, el dolor de espiritu (no de carne), la impotencia, la frustracion, el amor y la perdida del mismo, y un sin fin de etceteras personales y extranjeros. Mientras que mis pies estaban presintiendo el trafago terreno tres malevos hombre me desataron y me quitaron del rio regalandome una golpiza, al grito de "nos robaste la soga" o algo por el estilos, y siguiron golpeandome, la fiera golpiza fue una salvajada, una maldad... NO!, era: ¡la maldad!. Pues mejor me hubiesen dejado en el fondo del rio donde ya no molestaba a nadie.Comenze a hablarle entre quejidos de la creacion, se que usted no quiere que le hable de esto...Ya lo se. Si hace tres años que estoy aqui encerrado por esa cuestion. Se que de un momento a otro usted rechazara mi libertad, y en un mes estare diciendo lo mismo delante de otro. O que en unos segundos o minutos, ¿a quien le importa? me volveran a encerrar en esa blanca habitacion; pero lo que ustedes no entienden es que cuando cierran la puerta de mi "ergastula" esta se llena de agua y el piso se hace incierto, las paredes se mueven meneando como una correntada y a medida que corre el tiempo o el rio mi tristeza, mi melancolia (esa pequeña piedra organica) me hunde cada vez mas en el fondo eterno y un dia, yo vengativo, no volvere y yacere imperenne en medio de la vida, en medio de la creacion o bañado en mi conciente locura.

Exageraciones. Escritos etilicos con muy mala caligrafia

Tengo una clara increíble en lo que me he convertido. He dejado de ser o misma, soy un remedo ocioso de mis mejores tiempos, una llama q se extingue con la facilidad de la nada.
No he opuesto resistencia. Soy parte de la nausea nuevamente.
Intentar rescatar al tiempo. Que es tan perverso porque sabe q lo he desperdiciado de las maneras más bochornosas.
Siempre lo supe. Q no llegaría ningún lado con este oficio al que me quize consagrar. Es un camino tan difícil y me siento tan mediocre y sin ganas de lograr llegar al final.

Me saldre de la escuela un tiempo. A ver si encuentro algo de mi misma. No sé. Una estupidez más para variar.


Porque es tan difícil ceder a los propios deseos sin afectar a los demas?
Me siento tan derrotada, tan falta de entusiasmo. Sin la más mínima razçon para sacar un suspiro.

Peor es sentirse flaqueado por miles de culpas q conducen a un suicidio colectivo.

Me agradaría pensar q esta es una carta suicida.

Suicidarme, botarme, joderme la vida poco a poco

Alguna vez creí que mi vida se había tornado tragica. olvide mi vieja piel y empece de nuevo de una manera cavernosa e inoperante. Perdí los motivos que en algún momento movería mi existencia, tornandola oscura, pesimista, antagonica, horrible...
Y perdí el grial. La puerta se cerro de manera estrepitosa... y sabes que fue lo mas inapropiado de manera colosal? el hecho de no saber que la perdía... hundiendome en mi fango de banalidad y orocuanda necedad por creer. Pase por todos los estados de ánimo. Las lagrimas, las risa, la ira, el temor, el cinismo,

Cuando las feas nos revelamos

quieUna de las pocas ventajas que tiene ser una niña fea (y yo era horrenda, les ahorro los detalles), es que una no se hace la novela, deja de pensar la basura que a las otras les parece lo adecuado.. Lo que quiero decir es que una no crece soñando y emulando durante el día con las fantasías propias del genero femenino (chicos, la maravilla del cursor femenino o quien demonios se ocupe de estos menesteres allá en el Olimpo) lo cual nos tiene destinado un futuro glamoroso gracias al cual, nada mas quitarnos los calcetines de adolescente, nos encontraremos convertidas en alguna bella mujer. Lo cierto es que yo nunca fui partidaria de ese fantaseo iniciático-cinematográfico tan propio de la adolescencia (y ya sé, quedare fatal diciendo esto, y los mas freudianos considerarán que me falta alguna ternilla muy vital por no haberme querido parecer a las supremas feminas del cualquiera que fuese uno de los modelos preferidos de las niñas de mi edad, supongo que hubo mala suerte).
Pero el problema es que yo era fea. Fea y realista debo decir. Sin embargo, como nadie puede sustraerse a Hollywood como escuela de seducciones y todo el mundo aprende, quiera o no, el abecé de la erótica mirándose en un actor o actriz, un poquito mas adelante, ya con trece o catorce años, elegí un modelo acorde con mis posibilidades de seducción en la vida… No podía decidirme por cualquiera. ” Ya que no puedo ser guapa- debí pensar-, seré al menos interesante”Y me doctore con gestos irrascibles y los combine con propios.Puedo asegurarles que soy experta en las miradas, tambien en expresar todo con mis gestos o pelambres, y que decir de lo que quiero ocultar. Y luego, con 20 años, podría decir que soy imbatible en seducciones de mujer fea, pero jamás para seducir al sexo opuesto, sino para las personas en general.Pero lo malo del asunto es que luego fui creciendo (y mejorando, perdóneme ustedes la inmodestia). Hoy me parezco a Bette Davis como un huevo a una castaña y quizá hubiera quedado más armónico con mi físico el aprender en la adolescencia seducciones de otra actriz más afín a mí en mi apariencia actual, quien sabe. Sin embargo, yo estoy segura de que el haber tenido como maestra en las armas de mujer a una fea inteligente tiene algo de imbatible.¿Alguna vez se han preguntado porque las mujeres feas envejecen mucho mejor que las muy guapas?.Yo tengo una teoría al respecto. Pienso que se debe a que las guapas, al hacerse viejas, conservan todos los tics y posturitas que tan deliciosos producían en un cuerpo bello… y que tan patéticos son cuando la belleza se ha esfumado. Nosotras, en cambio, las de la escuela Bette Davis, las doctoradas en seducción de feas, siempre hemos sabido sacarles partido a… a otras cosas menos efímeras. Ventajas de haber sufrido en la infancia los caprichos de una naturaleza poco generosa, supongo

Por que insistes en esa basura? ¡No deberías estar tratando de hacer algo mejor por tí mismo?

Hoy extraño lo que fui contigo

Se que no he sido suficiente. ¿Y qué? Soy un descarado.
La luz en la mampara me dice que es muy tarde. No puedo apagar las luces hasta estar por completo seguro que llamaras a la hora acordada. Siempre tan fiera, tan banal, tan hipócrita. ¿Por qué al ser humano le gusta jugar con aquel que nos entrega su deseo?
No he podido mirar a otra, aún si no estas conmigo. Desear es un delito que se impone cuando tu cuerpo no me deja descansar en los brazos de una nueva amante. Las mujeres son escape, son azar, lujuria infinita. ¿Te gustaría sentir mi última bocanada de cordura? El teléfono suena. ¿Quién podría ser? Son las dos de la mañana. Es tarde… demasiado… demasiado para encerrarnos en nosotros mismos. Todavía tengo en los labios el sabor de tu boca mentolada. Mi vida gira alrededor de tus mentiras. Me siento honrado. ¿Seré el único? ¿Será saludable hacernos estas preguntas? ¿Cuánto sexo obtengo por un pedazo de cielo? ¿Si te prometo mis ojos renunciarías a tu frialdad por un día? Estoy cansado. El teléfono sigue sonando. Me pregunto si quieres jugar hasta que llegue el ciclo… será divertido estar a tu lado mientras el sol nos roba otro día. ¡OH, mi dilema! Que agradable es darle una oportunidad al que esta a lado de saberme indescifrable. Tu emoción no se parecerá jamás a la mía. Eres droga. Inanimada y liada a la soledad embustera. Si hoy te dejara me destruiría por dentro, aunque viviría muchos años a sabiendas de la delicia que fue la pertenencia, si he de quejarme, soy un penitente nato, pero… ¿y si te dejo?... me convierto en mierda pura… por el contrario, si me quedo me harías trizas sabedor de que algún día te cansaras de aquel juego infame en tu mundo divertido. ¿Me llevas a donde va el eco? Apostaría mi evolución inspiradora a que jamás te habían dicho que atraes a los desquiciados. Los locos tenemos una forma remota de perderse en la derrota de tu aroma. Jazmín, azahar, roca de olvido… como aquella soledad que mata y hiere. No huyas, ven, sé fugaz, pues bien sabes que el tiempo siempre teme al que no se atreva a ser tan vivaz. Poesía de mil anhelos, y sigue sonando mi escape. Interrumpo mi nerviosa visita a tu casa, mi voz no suena como debería, debo recobrar la compostura para que sepas que el día de hoy quiero ser el que lanza la jugada inteligente en las piezas de madera. Lo que esperaba… ha dejado de sonar… eres una Bruja, hoy no tardaste más de 5 minutos en destrozarme los nervios.
No se. Hoy lo siento. Siento que ya la extraño. No se si a alguien o a algo, pero siento que extraño muchas cosas. Tal vez sea la inmadurez con que me he tomado los últimos años. A lo mejor es mi adicción por la pornografía que me ha hecho insensible. Ya nada me toca si no tiene tu gancho al hígado. Todo mutila mi sentir. Me palpo extraño, externamente sé que me hacen falta muchas cosas en este lapso de mi otoño. Ya hasta la felicidad me acompaña sin las fanfarrias belicosas y en el hambre la tristeza jura ser mi amante. Si no conspirara, ¿como debería amarla? ¿Como hago para dejar de extrañarte?..Risa, risa... ¿de que nos reímos cuando contabas una anécdota banal? Lo digo. Te extraño. ¿Habría de hacer otra cosa? Tu sabes... Se dan lapsos incautos en que el extrañar ya es un estado de inerte permanente. Una línea paralela hacia el desastre más difuso y coloquial. ¡Que humano! Cuanta vanidad. Te extraño y lo sabes. Más que extrañarte extraño el sonido de tu risa contagiosa y las lágrimas que provocaste cuando te fuiste con él y no conmigo. Hace siglos y sigue doliendo. Ahora si quiero dormir. No quiero que sepas que estuve pensado en ti más de lo debido… eres capaz de pedirme regalías por no perderte de mi espacio. Nada, en serio, va a cambiar lo que siento por lo que fui cuando estuve contigo.

Dedicado a ese Vanidoso de Mierda… si… ¡y que! P.S. Es la cosa más idiota que se me ha ocurrido. Pero en esencia es lo que quiero decir. Tu sabes de lo que hablo, no?l´ame n´a pas de sexe......On a fait le monde ainsi!
El olor se mantiene en el ambiente. ¿Ves lo que me haces?, debo dejar de beberte, de fumarte, de añorarte. A donde te has ido, amante seductor, corrupto empedernido, ingenioso artista liberal que hace de mi vida un desperdicio con su ausencia. Es acaso que te has muerto -los valientes lloran y el estigma de que mañana moriremos ha cobrado un sentido secundario-. ¿que me haces? Pregunta enardecida mi razon. Es acaso que la llaga se convierte en laberintos de sosiego, inútil terquedad.ya sabes cuanto te extraño. No es cierto? Te extraño en el momento que te conozco, la partida fue solo la consumación de mi desgracia.

una navaja recorre mi cuello, se siente el universo tras de sí. Como es que no me había dado cuenta de eso. Cuando te esfumaste, cuando permití que te alejaras -bah!, no me dí cuenta, eso es todo-. Tu perfume me embriaga... es quiza una de las cuestiones menos alturistas pensar en lo insulso de los aromas. pero tu me gustas, de la manera en que consigues orbitarme hacia tu averno. He agraviado la lastima. Quizá te invite a tomar un poco de té de hierbas y sufra por el genocidio intelectual. Suena interesante cuando se trata de los verbos necesitar, querer, deseay añorar. Añoranza! que sutil embrujo envuelve ese retoño, pedacito de inanimidad, ultimatum del asiduo inclaustrado. Sé que tienes mas de una razón para alejarte -o para haberlo hecho, pero bah! relamo mis heridas y cada vez me siento mejor...-Realmente me preocupa experimentar estos sentimientos... será acaso que la espina que fugazmente me insertaste ha echo estragos en este corazón que no respira?

Como un siniestro maleficio. Cuanto hace que la luz dejo su estetoscopio encendido. estaba acomplejada perdiendo silencio ante sus ojos oscuros y su nariz aguileña. Un día más, para variar. El sol ilumina tenuemente y con encanto avasallador. La puerta muida involucra los deseos. rechina. Pecaminoso el que se oculta de nuestros besos asesinos. solía creerte. Solia hacerte el amor. Creyendo en que puedo extrañar las causas ocultas. Viste que destino tan indecente abria las noches, cuyo arruyo incauto repregaba los susurros, convirtiendonos en clandestinos inhumanos. La sed de tu sangre se ve colmada con lo unico sencillo que poseo. Me gustas. Como? suenan obsenas las declaraciones de parto. Acritica, exponencial, frivola, inocua, triste, silenciosa me dejas. El ensayista y criminal taciturno nos deja una valiosa lección: no te sirvo. Y visceversa. Tienes las endiduras apretadas. He dejado de gustarte. Me incomoda la manera en que me miras. He derramado por ti más lagrimas que las que he hecho antes de conocerte. Mi vida es un desperdicio porque te poseo. hemos caido en el circulo de la monotonía. Eso es lo que extraño. Hoy añoro lo que fuimos. Parado brucamente. El aliento nos ha sido arrebatado. Ya no soy joven e inexperta y tu cada día eres más decadente. Una vieja canción se oye a lo lejos. Unos le llaman cortes, otros simplemente voces que distraen. En la medida que crecimos nada nos parece perfecto. Somos ajenos. Que más da. Besame y olvidemoslo.

Eso eres?

Tiene razón Blaise Cendras cuando afirma: "no es acaso la familia un grupo de seres unidos por el azar y vinculados por la hipocresía?"

Rescatando la existenciaEsterilicé la forma de verte,reforme el estilo degradantepara fustigar al carcamal residenteen le largo tiempo humillante.Extrañe a tu prodigiosa lengua:besos gratos, largos, llenos de agua.Reafirmé los pasos para salir de la tumba contigua,y tras todo esto renací de la fragua.Ahora camino, ya no como el reptil,ya no, ahora respiro y te odio de una manera muy sutil,ahora te deseo más, pero sin perderme. Ya eres inútilpara el cursi poema. Y atravesada moriste por mi buril.Te desvaneces lentamente apoyada en un mal llamado recuerdo, yaces colgadaen mi memoria, estereotipada,bella y sin razón para seguir con vida.Resuenas como un desabrido y benignollanto que escudriña entre las viseras el signode vida limitada y simplificada a lejano recuerdo , estrangulado, carnal, pagano.Esto no fue forjado por la musa que en ocaciones reproduces en las noches góticas, pero que más, no eres real.¿Que haces luego de vivir el dia y descubrir que no eres mas que punto mas?Pensé esto de ti después de escribir:Eres un híbrido formado de la falsa verdad y el deseo sexual que retuerce nuestros intestinos.No es verdad.Hasta siempre.Hadhoram sepulcri.

Vise.e.e

Comisiones

· Todos soñamos con el amor. Le damos categorías y nombres diferentes. Pero el amor por el amor, el amor como tema de esas noches de infortunio, ese amor va de la mano al deseo. ¿O habrá quien pueda separar el amor del deseo, habrá quien haga del amor una entidad separada del deseo?
· De noche el cuerpo es fuente de luz. Atrae en igual medida a los mediocres y a los trágicos, a los humildes y a los pagados de sí mismos. De noche el cuerpo es un gato caminando por el filo de la barda. Si el observador se acerca más de la cuenta, provoca que el aludido huya y se pierda para siempre. De noche el cuerpo es de nadie, aunque se le posea. Aun en ese momento sublime, el cuerpo tiende a hacerse uno con la noche. La noche es testigo de su pecado de amores. Y, quién no lo sabe, nadie puede apropiarse de la noche para su propio solaz.
· El cuerpo es complaciente, el amor es despiadado. Basta cerrar los ojos para que el cuerpo se nos dé. Para que aquellas formas que deseamos se torne primero visible y luego nuestra. El deseo es el ímpetu de esta transformación. Bajo la erigida del deseo, aun el cuerpo más impensado, más ajeno, termina por ocupar nuestro pensamiento. Un cuerpo suple a otro. Pues siempre ha habido cuando menos un cuerpo: el nuestro. Bajo la mano imbuida de deseo, aquel cuerpo se torna reconocible. Por la memoria está en la piel.
· Los cuerpos son quemaduras que en otros cuerpos se agrandan. Más aún, convierten a una piedra en un hombre. Pero, dice Cernuda, al paso del tiempo aquella quemadura desaparece para volver a ser piedra en el camino de nadie. El cuerpo, entones, es efímero, y como no... El placer que proporciona cuando se le toca, el gozo que despierta al paso, el sudor que se impregna a su vez, desaparecen aun antes que el deseo. Aun antes que el poema. De ahí que el cuerpo ocupe el primer rango en la memoria. El cuerpo en todos sus matices: aquellos cuerpos que nos tocan cuando somos niños, el contacto maternal y del cual dependía la vida; esos humores que salpican la nariz y que parecen desparramarse del trabajo cotidiano de nuestro padre; el grito de una llamada a comer cuando los platos están servidos, ese grito que hollaba nuestra alma, mucho antes que identificáramos el sonido de la música o de la poesía; las lágrimas maternas que bebíamos en la sopa de cebolla, a la luz tintinarte de un regaño, a la espera de la ventana de alguna travesura, a contra luz de una puerta mientras el sueño nos otorga una ristra de imágenes, cual guardián en su silueta...
· Un cuerpo siempre esta ávido de recibir otro cuerpo, en iguales circunstancias de asombro, de carne, de ensueño. Los cuerpos se buscan entre sí, como entre sí se buscan los versos para formar un poema. Somos cuerpos. La única certeza al perecer. Al nacer. El cuerpo es lo único que nos queda.
· ¿Cuales son los contornos verdaderos de un cuerpo, su límite, su especificidad, si el cuerpo es una brizna entre los elementos?
· Evocar el cuerpo que alguna vez fue nuestro; invocar la pasión que de pronto nos está más aquí, retrotraer la pasión que nos mira de soslayo no debe conducir a la amargura, sino a la reconciliación, a la dicha de haber gozado lo que la vida nos proporciona, que de cualquier manera, aquí, en la cabeza, aun es nuestro.
· Una cicatriz es una cosa aparte. Una cicatriz es los acontecimientos más memorables que le pueden suceder a un cuerpo. La cicatriz le da al cuerpo cierta permanencia incorruptible. Todo alrededor de ese cuerpo -lozanía, frescura- tiende a desaparecer o de hecho va desapareciendo; la cicatriz no esta sujeta a los caprichos del tiempo. Una cicatriz le da importancia a su poseedor. Es superior al resto. Ha padecido algo: dolor, violencia, enfermedad, castigo; que el resto del cuerpo no ha sufrido. Cuando la cicatriz se lleva en pleno rostro provoca estupor general, atrae las miradas como fragmentos al imán. Cuando una cicatriz va de un extremo al otro del vientre, provoca un deleite en el cuerpo del otro, unos deseos inextricables de fundirse en la piel cosida de la mano... y sanarla.
· En realidad los cinco sentidos están desparramados en el cuerpo, habitan el cuerpo de un punto al otro. Lo recorren en todos sus confines. Saben sus secretos, conocen sus hosquedades más profundas. Los sentidos deambulan la piel toda. Oímos con los dedos de los pies, vemos con los codos, olemos con las pantorrillas... El descubrimiento del lenguaje del cuerpo dura lo que nuestra vida. Jamás lo concluimos. Ciertamente el sexo enriquece esta exploración, pero de ningún modo es el único camino.

Hoy, como siempre, todo es tan estúpido

Hoy. Hoy que pasa tan lentamente. Hoy que no es ayer. No recuerdo. Es decir, quisiera hacerlo. Tengo la imagen de tu cabeza recargada en mi pecho cuando fingia dormir. Tus manos tomando las mias mientras contestabas el telefono. Mi respiración irregular con tu olor en mi espacio. Quisiera recordar tus besos, pero no puedo. Tus besos son tan tragicos.
HOY QUE PASA A SER MAÑANA…

“Hubo un tiempo en el que creí que haber llegado al límite del dolor. Pues bien, no, todavía es posible ir más lejos. En el confín de esta comarca hay una felicidad estéril y magnifica.”
CALIGULA. (Acto IV, Escena XIII). Albert Camus.
Es un día de mierda. ¿Por qué no pueden sucederme cosas normales? Te diré... ¡maldita sea!
Camino durante media hora para llegar a un recinto seguro donde exista banda ancha. Detesto mi adicción por la Internet. Más aún, detesto lo que esto genera. Siempre camino tanto para llegar a un lugar en el que sea más o menos anónima. ¿Quién dice que es fácil vivir en un país de mierda? Le pedí a mi madre que no llevara a compostura mi máquina. La tuve sin reparar cerca de 3 años. El motivo principal fue siempre controlar mi adicción. Sé que teniendo Internet en casa me jode la existencia, porque comienzo temprano y no puedo parar. Todo es tan monótono y a la vez tan interesante. Me llega a la cabeza Marlon, mi primer amigo. ¡32 años tenía! Que locura. En mi travesía para llegar a mi desdicha tengo que pasar por una avenida que no debería ser tan rápida. Lo observo. Es tan pequeño. Es un perrito que no debe rebasar un mes de nacido. Es blanco, con tintes negros en la barriga y salpicado de pecas café. De pronto miro a los autos que le pasan de largo. “¡Perro imbécil! ¡Muévete!” –Grito agresivamente, así suelo ponerme cuando el borde de la angustia me impide reaccionar de manera coherente. Quise lanzarme a rescatarlo. ¡Lo juro! Siento mucha más empatía por un animal que por un ser humano. Lo mire. Observe a lo lejos ese “Guajolotero”, su motor… un miedo irracional y una cobardía propia de los infantes me hace huir. No soy una heroína para lanzarme a la calle y salir ilesa con el perro en brazos. Apresure el paso. El motor pasa a mi lado. Cierro los ojos y camino aún más rápido para no ver nada. Un sonido seco. El camión que se aleja. Mi morbo es mucho más poderoso. Esa curiosidad por conocer el resultado. ¡¿Y si no murió?! ¡¿Y si sigue allí, pleno y maravilloso, pequeño y vulnerable?! ¡¿Y si el camionero se apiado de ese ser tan infantil?! Volteo. Mi esperanza muere con él. Debí recordarlo…los cafres del Estado de México son unos hijos de perra. Pero… insisto… ¿Qué culpa tenía ese infeliz cachorrito?
Camine con tanta tristeza. Llore (hacía tiempo que no lo hacía)… mi esperanza al borde de una cobardía. ¿Por qué a mi me pasan estas cosas tan pendejas?
Abro mi MSN poco rato después de intentar escribir esta basura. No logro plasmar absolutamente ningún sentimiento. Ojala y expresarse fuera más sencillo. La muerte es una cosa tan absoluta. Me preocupa un hecho tan aislado y tan latente en mi corazón. Crece ese sentimiento de manera virulenta y se agolpa en mi garganta. No quiero hablar. El chico del Ciber me mira. Supongo que le extraña una vieja de mi estilo con las mejillas mojadas. Es maravillosa la lluvia que ha caído en mi cabeza justo antes de llegar a mi objetivo. Mi único conectado es Mr. Oscar. Lo saludo. Todo sigue tan igual…

“Tengo miedo. Qué asco, después de haber despreciado a los demás, sentir la misma cobardía en el alma. Pero no importa. Tampoco el miedo dura. Voy al encuentro de ese gran vacío donde el corazón se sosiega. ¡Todo parece tan complicado! Sin embargo, ¡Todo es tan sencillo! Si yo hubiera conseguido la luna, si bastara el amor, todo habría cambiado. ¿Pero dónde saciar esta sed? ¿Qué corazón, qué dios tendrían para mí la profundidad de un lago? Nada hay, ni en este mundo ni en el otro, hecho a mi medida.”
CALIGULA. (Último acto). Albert Camus

Me encontraba esperando el metro. Ya tenía aproximadamente 5 minutos de retraso. El sonido citadino poco a poco queda en calma debido al horario en el que me encuentro. Son las 11:35 de la noche. Seguramente por que es tan tarde ya no pasa con tanta eficiencia. Suele pasar. Me subo al vagón de adelante. Prácticamente anda vacío de no ser por un anciano que dormita. Lo miro con melancolía. De repente se despierta, mira la estación, se levanta justo antes de que cierren las puertas, sale y me quedo sola. Sigo mirando la ventana, de repente me pongo a cantar. “I love the silent parts, the parts the birds love, I know I such a face”. Jajaja. Ahora canto hijo de la luna… ay que pesado… entre el cielo y el suelo hay algo, muro…
Luna, algo esta sucediendo!, estoy sintiendo que esta vez me estoy quedando solo… al menos solo… como la noche...


"Empece en la sombra y sin duda terminare en ella" Don de Lillo


Como flor de adrenalina
frente a las puertas del cielo
Como burbuja extraviada
como un angelito en celo

Como un dolor en el alma
como un beso en la interperie
como polvora en la palma

john escribio una cosa que medio entendí

Me pase a beber un trago en aquel patético bar, porque simplemente no tengo opción. Traigo esta idea loca desde hace rato, y eso es lo que me motiva a estar siempre borracho. No puedo simplemente sacarla, se me ha cristalizado en la sangre como si fuera ya parte de mi condena, busco en mi bolsillo y el contacto con ese objeto frío me congela las venas. Miro nuevamente mi vaso cuyo fondo he memorizado. “¡Sirve otra!”, el cantinero me mira con lastima y me cuestiona sobre mi estado. “¡Bien, carajo!, ¡pago por bebida!, ¡si quisiera preguntas por mi salud, acudiría al medico!”. Nuevamente el cantinero me mira como si mi pena le pareciera familiar. Que diablos, no sabe nada. “¿Como se llama?”, susurra mientras el tequila, claro y puro de Arandas, Jalisco, se desliza por mi garganta. Me rió. Todo lo asocian a decepción amorosa. Debe ser en la escuela a la que asisten estos perdedores. “Eva”. Escupí el primer nombre que se me vino a la cabeza. Eso pareció dejarlo satisfecho y me dejo embriagarme a gusto. No tardo mucho tiempo en entrar ese muchacho de camisa extravagante. Me miro con sus ojos oscuros envueltos en gafas de pasta. Eran pequeños y de pronto me dio confianza, como si estuviera esperándolo de toda la vida. El cantinero se acerco nuevamente, detestaba su sola presencia, pero a la vez agradecía poder sentir agresividad mitigando ese miedo terrible. Me pidió otro trago. Se lo agradecí con un movimiento de cabeza y de pronto ese oscuro vacío. Bebimos en silencio largo rato.

Él no dejaba de golpear la mesa.Tenía una palidez demencial y en sus ojos, abrazados por unas marcas negras de varios días de noctámbulo, estaba dibujada una tristeza incontenible. Mi mano toco su hombro y con aquel contacto se desplomo del todo en un llanto desesperado. De pronto, movido por la necesidad, comenzó a hablar lenta y pausadamente.

-Tengo un amigo… su nombre es John… hace rato que lo conozco, en aquellos tiempos que era famoso, aunque no lo creas, tuvimos varios desmadres y nos volvimos a encontrar cuando su vieja lo dejo. Andaba bien deprimido y que se lo llevaba la chingada, como perro sin dueño, hasta que ella lo perdono después de un chingo de condiciones. Total que un día me invito a la casa que compraron aquí en Nueva York y ella se porto cortés pero de lo mas fría, no le di importancia porque lo atribuí a que los japoneses tienen costumbres raras con los extraños. Mire el reloj para irme, pero John, en un desesperado intento porque me quedará más tiempo me pidió que jugáramos billar. Al salir Yoko de la estancia me susurro a penas de manera atropellada que siempre andaba como pendejo, que no se sentía el mismo, que era como… como si fuera dos personas distintas… una era la que hacía música, la que siempre había sido, la parte sensible y desmadrosa, la que no tenía dudas y era independiente y que de alguna manera misteriosa se andaba atrofiando, la otra era la hogareña que estaba en constante pelea con la primera parte que era de un estilo más rebelde y autónoma. Me miro a la cara y me dijo que en esos lapsos mientras dormía él había grabado todo lo que pensaba, hasta de sus sueños más austeros que el jamás podía recordar… que se encontraban en el estudio. No pudimos seguir hablando porque Yoko entro con una bandeja de alimentos raros y John me dijo que tenía que irse a dormir porque andaba bien cansado. Yo le sonreí tomando muy en serio lo que me había dicho. Una día que se fueron de viaje espiritual por el mundo por disposición de ella y la posición de los planetas y esas madres con que ella le jodía la cabeza, me metí al estudio con una llave que anteriormente le había robado. Me metí, y ahí, entre todas sus cintas y demos estaban las cintas que él me había mencionado. Su voz se escuchaba como adormecida, con un toque extraño, donde relataba que en el té que tomaba por las noches una vez por accidente observo que ella le echaba unos polvos para dormir, a él se le hizo raro, pero no dijo nada y esa noche tiro el té pero fingió dormir. Al poco rato ella lo miraba y le echaba rollos de cómo debía amarla, de cómo comportarse ante la gente, de dejar el rock&roll y de pelearse con sus amigos porque en el mundo nada más debería existir ella y su felicidad conyugal, así como que debía indagar por todo el mundo que eran felices. De pronto escuche en la grabación que el se había dado cuenta de que saco de un estuche con terciopelo negro una aguja larga y gruesa de oro y le picaba las dos venas. De pronto ella comenzaba a mezclar la sangre con diferentes yerbas previamente tratadas y las bebía y a su vez se hacía lo mismo dando de beber a John de la suya y de la propia. Esto a John le produjo una sensación de decaimiento generalizado, pero por más que quiso dejarla, algo se lo impedía, incluso cuenta que mientras anduvo separado de ella, sus motivos para volver con ella iban más allá de una necesidad primordial como cualquiera de nosotros, sino más bien en un sentido inexplicable y sobre natural que el no podía controlar.. Al volver, lo busqué, estaba muy aturdido por las revelaciones y se lo conté todo. Ni siquiera tuve el cuidado de ver si ella nos estaba escuchando. John me miro, bajo la cabeza y no supo que decir. Luego se rió de repente y me dijo sin el más mínimo asomo de preocupación, más bien una resignación absoluta, “estoy jodido”. De repente fue todo tan claro. John estaba perdido. Me levante presa de una sensación de pánico tan grande. Cuando me aproxime a la puerta ella me acompaño a salir. Me miro a la cara, y me dedico una de esas sonrisas de medio lado tan enigmáticas como espeluznantes “…Buena suerte” y me dio esto... – saco de su bolsillo una bola negra y comenzó a girarla con los dedos mientras no apartaba la vista de su rotación, pude ver de pronto un brillo resignado que me dejo frío…- Este el precio de mi torpeza. Ahora siempre me la vivo en este estado deprimido, borracho, irreal, presa del miedo… ya no tanto por mi amigo… sino por mi mismo…

No pude seguir escuchándolo. Salí rápidamente del bar. Llevaba rato con esa idea. Me acomode las gafas y saque de casa mi disco Double Fantasy… lo espere, no fue mucho, lo vi llegar al edificio Dakota. Me acerque a él para pedirle un autógrafo. El me miró de repente, como ausente, le susurre al oído que lo sabía, que todo estaría bien. Entonces John tomo mi disco y escribió en él algo que no entendí. De repente Yoko salio de la nada, con sus ojos rasgados y su sonrisa demencial de medio lado, John estaba pálido y no articulaba palabra, le pedí que se alejara, pero ella se iba acercando poco a poco, saque el arma y la amenace con que retrocediera y nos dejara solos, le rogué que se fuera, ella me miro con esa tranquilidad desquiciada y yo le apunte, John no dejaba de mirarme, parecía de acuerdo… y entonces… dispare…

(cuento modificado de el original publicado en la mosca en la paderr)

Una tarde en el cine

Dedicado a… ¡ya sabes a quién me refiero!, y a nuestros apuros cada que nos vemos en el cine, en el teatro o en cualquier lugar público. Eres puro veneno. Jaja. Te quiero... “…lento… amargo animal, que eres… que siempre has sido…”

Le dije:
-Quítese el sombrero porque me estorba.
Me volteo a ver.
-Deje de molestar –advirtió.
No me dejaba ver la pantalla. Le sugerí a mi acompañante que cambiáramos de sitio.
-No, quédate quieto, me da vergüenza –dijo, en voz baja. La miré con verdadera impaciencia mientras se llevaba un puñado de palomitas a la boca.
-Hágame el favor de ponerse el sombrero en la rodilla –Recapitule tocando su hombro.
Esta vez ni siquiera se inmuto. Me volví hacía mi acompañante, que entretenida sacaba otra tanda de palomitas, “¡Mierda!”, pensé.
-¡Ese sombrero me molesta! –Dije en voz perfectamente audible y enfadada.
Se lo quito. “Buen hombre”, cavilé. Poco duro el alivio, volteo de pronto y me dio un sombrerazo que me dejo desorientado y confundido. Oí risas alrededor. Se coloco el sombrero de nuevo.
-…para que no este molestando… –alcancé a escuchar que decía el sujeto para justificarse con nota burlona.
Mi acompañante me echo un vistazo extrañada.
-Deja de molestarlo –Suplico en un susurro.
Y nuevamente se lleno la boca. Creo que esta demasiado nerviosa.
No veo absolutamente nada de lo que ocurre en la pantalla. Sacó mi lámpara de bolsillo. La enciendo Abro mi libro y comienzo a leer. Es una luz tenue pero precisa, aunque con la oscuridad era notable por lo que mi compañera se volvió a mirarme con reproche.
-No seas absurdo.
¡Jah! ¿Yo absurdo? ¡Yo no soy el que usa un sombrero en el cine! Hice caso omiso.
El matemático Philip Cunningham seguía recordando su vida inútil entre razonamientos formalistas, análisis combinatorios, axiomatizaciones de teorías, eliminación de paradojas, cicloides, los círculos octogonales, las circunferencias tangentes, los problemas de Apolunio, las coordenadas cilíndricas, las ecuaciones diferenciales no ordinarias e integrales abelinas. Arturo Azuela nos esta contando las divagaciones de un matemático, pero nada a su vez. Página 229 y sigue sin pasar algo. Tan ensimismado estoy en la premisa de que el investigador emérito Zemansky, maestro de Cunningham, se preguntaba por cuadragésima cuarta ocasión si las matemáticas eran una ciencia cuando mi adjunta me codea con voz molesta.
-Apaga ya esa luz, ¿quieres?...
Y el sujeto de adelante, sin voltear, se quito el sombrero y me asestó un golpe con elegancia propia de los caballeros. Mi compañera se ríe bajo.
-¡Hey! –Exclamé al sujeto.
-Su luz me daña –Amonesto.
La miro a ella que sigue la película con ánimo exaltado. (Puedo jurar que a esas alturas no sé ni siquiera la trama. Eran tan lejanas para mí las risas o el pesado silencio de las personas que estábamos atrapadas en esa realidad sistémica. Pero yo sigo sin mirar nada.)
Me levanté.
-¿A dónde vas? –Preguntó ansiosa.
-Al lobby, ahí te espero...
Antes de salir y motivado aún por un impulso irremediable, di un manotazo al sombrero, que fue a dar dos o tres filas adelante. El tipo reaccionó con una furia inesperada. Cobardemente apresure el paso hacia el pasillo (mis ojos acostumbrados a la penumbra permitieron mi huida de manera fácil), mientras el sujeto me sigue. Algunas personas dramáticamente aúllan:
-¡Lo va a matar!
-¡Deténganlos!
No era para tanto, creo.
Salí al lobby para subir a prisa por las escaleras, la planta alta parecía una alternativa de escape sutil y efectivo. El tipo y su necesidad de desquitarse no aminoraban esfuerzos en alcanzarme.
-¡Detente infeliz mal nacido! –Imprecaba.
Oí unos aplausos.
-¡Corre más fuerte, compañero! –Me alentaban, aunque claro, también los había quienes suspicaces me culpaban de mi destino
La suerte estaba echada. Era el momento en que él cedía o yo me abandonaba a la persecución. Era una trampa. Si yo corría el sujeto me atraparía: si intentaba apresarme, yo me le escapaba. Pero yo era un estorbo evidente para los que estaban por delante y detrás de mí.
-¡Muévete grandulón! –Gritaban.
-¡A jugar a tu casa! –Entre otras cosas más vulgares.
El individuo seguía claramente alterado. Pensé, con cierta alegría (provocada por la adrenalina del peligro), que el ofendido debería ser yo.
O él o yo, tuve la generosa paciencia de esperar a que se le bajara la cólera. Me agache para no molestar la visión de los espectadores.
-¡Han de ser agentes encubiertos, par de psicópatas! –Esto me causo una risa divertida.
Estaba abochornado. Sudaba demasiado. Me sentía provocadoramente infantil. Juego y azar. Nada más apasionante en las matemáticas.
El tipo tuvo la desagradable idea de bajar las escaleras para ir por mí. No espere a ver su reacción de cerca, corrí como verdadero gallina Salí a la calle, cual noctámbulo trasunte, busque con la mirada a alguna autoridad, me acerque a un par de policías que exhalaban el aire frío, aparente tranquilidad con paso firme y rápido. Al verlo entretenidos seguí mi huída de manera ridícula. Al fin la salida, doble a la izquierda. Los mire, les sonreí calmadamente y camine por la transitada avenida. Anduve como el viento en un día de tormenta. En cosa de algunos minutos la ventaja que llevaba me sirvió para andar de manera más calmada y lejana del cine. Nadie me seguía. Tome el metro. Iba vació. “Gracias al cielo”, pensé, suspirando. Tome asiento. Abrí el libro en la página 132 de <>. Cunningham continuaba con sus desquicios inútiles. ¿A dónde iba? ¡¿Qué importaba?! Me baje en la siguiente estación. Salí. Estaba en Bellas Artes. Camine un rato más por la avenida Bellas Artes. Siempre es tan hermosa por las noches. Ahora me sentía tranquilo e increíblemente renovado.
Tal vez mañana le hable por teléfono para saber sobre su estado y la llegada a su casa. Quizá siga enfadada. Si me acepta la próxima vez la invitare solo a comer.
Torcí la boca en una mueca satisfecha, ¡por supuesto que quiero saber al menos el titulo de la película que fuimos a ver!

FIN

Parece como si en verano.. las cosas son más francas

“Y como es ella?, es linda?, Es buena?, La quieres mucho?... No, no me lo digas, es mejor así y duele menos…” Canción para una esposa triste.

No, la puntería no me falla, están coqueteando. Pero como siempre me quedo callada. No quiero que él sepa que estoy celosa por una mujer tan radiante como ella. Las mujeres deben defender su territorio a capa y espada, pero en mi caso, yo soy del tipo cualquiera que tiene suerte de que un tipazo como este se halla fijado en mí. Debería estar agradecida y jamás reclamar por el bien de mi salud mental. Francamente no he logrado entender a las mujeres como ella. Debería enterarse de una buena vez que no es bienvenida en mi espacio. Pero recuerdo que la cacería empieza cuando el hombre no está nada disponible. Y yo luchando soy tan eficiente como la burocracia gubernamental. Como siempre, es un horror hacer tratos contigo. Creo que esta muy equivocado si cree que me humillaré públicamente pidiendo una explicación. No me gusta pelear por causas perdidas. No sé. Siento que este debería ser un momento más agradable. Me puse el vestido más lindo que encontré. Yo creí que me veía deseable, pero basta detenerme 5 minutos en tus facciones para saber que soy tan sosa como siempre. Ella no, ella es terriblemente atrayente. No quiero seguir viéndola. Es obsceno. Me alejo, a penas sin hacer ruido. Todo sonrisitas, luz dorada. Me escabullo entre la gente y me voy al tocador. Mi rimel se ha corrido un poco por las amenazas de mis ojos para llorar. No quisiera llorar por él. ¿Qué no debería ser una noche amena? ¿Por qué no coquetean cuando no estoy para verlos? No aguanto. Tomo mi chaqueta y me despido de mi amiga con un beso en la mejilla. “¿A donde vas?” Me pregunta con aire inocente. La miro con una nota amarga, pero fingido cansancio “A casa, no le digas a Roberto que me fui, a él le apetece estar un rato más, y la diversión jamás se niega”, me mira con su aire comprensivo perfectamente ensayado. No la culpo, hace lo que puede. Me parte en dos la última mirada. Me escabullo entre las calles oscuras. Llueve. No podía ser más poético. Si, quiero llegar a casa y darme un baño largo. Una secreta esperanza de mi novio saliendo a toda prisa para alcanzarme queda en eso… en una absurda esperanza. Sigo andando, quisiera que me atropellara un auto o que me asaltaran para hacerlo sentirse por lo menos culpable. Pero, como siempre, la suerte no sonríe a los que esperan lo peor de la vida. Ya, me interno en la noche. Se ha logrado despejar un poco y la luna se ve tan hermosa y tan mágica. Cómo me gustaría compartirla contigo… Llego, abro la puerta y toda esta en silencio. Me meto en la ducha, me pongo esos calcetines enormes de lana que son tus favoritos, mi impermeable es tan singular. La maleta esta empolvada. A estas horas no sé que rumbo tomar... sé que si voy a casa de mi madre me buscará sólo por formalidad, no quisiera eso, ya fingimos demasiado… Ya sabes… obligarte a hacer algo que ambos sabemos que esta podrido. De repente una risa histérica, casi psicópata, rompe con todas mis defensas y simplemente me tiro al piso presa del cansancio emocional. Es tan difícil cargar yo sola con estos pensamientos tan errados. La maleta azul es perfecta. Un poco de ropa. AL diablo los recuerdos. Cierro con lentitud mis bitácoras y mis pinturas de los días felices. Te escribo una nota muy sencilla que espero que entiendas por el bien mío.
“El querer nunca es suficiente. No basta para hacerme feliz. Te libero de la broma que es estar conmigo. Duerme bien. Me voy con el que quiera...
P. D. Arriba los pumas” Se que te reirás con esto último. Ojala te sientas aliviado. No quisiera causarte ningún disgusto o problema. Ah, bueno… vuelvo de nuevo a mi vida nómada. Estamos tan rotos todos los días. Me pregunto cuanto costará vivir indefinidamente en una clínica de neuróticos. Necesito ayuda profesional… o un poco de Alzheimer…ya sabes… por si me acuerdo de que te amo…

Requisitario: recetario de la felicidad.

Primero ¿Por que siempre es tan difícil creer en lo que otros dicen?
Francamente no he estado bien. Todo parece tan confuso desde mi perspectiva. La escuela, los amigos, la gente, la otra gente, los momentos, las circunstancias, las personas (las reales), los espectros, la microbiología, la bromatología, tecnología farmacéutica, mi agujero interior.
¿Dónde esta esa persona especial? Quisiera salir un día de casa y que me estuviera esperando en la acera mientras llueve (que estupidez la mía! jajajajaja, mi idea del romanticismo es muy ambigua y a la vez muy chafa).

¿Qué debe tener un hombre para tener mi amor? Jajaja, lamentablemente no es tan fácil…
1.- Debe saber lanzar una roca con la puntería de un franco tirador (“Donde pone el ojo, pone la bala”), jajaja… jamás aludo al sexo!.
2.- No hay nada más atrayente que un hombre que sabe cabalgar… recuerdo que viví enamorada de mi primo “José M” porque era todo un jinete. El campo, sabía cazar conejos, rastrear animales, trabajar la tierra, adivinar las lluvias, contar sus tragedias como verdaderas comedias y sus aventuras como un juglar empedernido… (Ahh, Es tan difícil en estos tiempos tan complicados de repente encontrar un espécimen como esos...)
3.- Mi hombre debe saber y ser hábil: jugando canicas, baraja, trompo, videojuegos. Conocedor implacable de autos, música, historias. Debe ser temerario cazando ratones, reparando cosas, regateando, conocer lugares espléndidos, gozoso de los placeres tranquilos y solitarios, de un magnánimo sentido de la lealtad, la honestidad errada, ser franco con sus placeres personales… que me sepa robar el alma al atardecer y despertarme en las mañanas con la sensualidad de un susurro imperioso… (Chale, que pinché cursi me escucho…).
4.- Que comparta mi gusto por viajar y por despilfarrar el dinero en cine, teatro, pornografía, música, chacharas, artesanías, café y cigarros.
5.- Debe hacerme olvidar que existo, hacerme llorar de vez en cuando y reconciliarnos con la vehemencia de dos posesos inigualables.
6.- Debe hacerme arder, hundirme en su fango, limpiarme y resucitarme al tercer día, hacerme trizas y siempre volver como un campeón, dejarme ganar de vez en cuando las batallas aunque no tenga razón, objetar las ilusiones más pragmaticas. Debe entender mis señales, hablar mi idioma mudo, mi teatral conjetura, mi comunicación con mi amante debe ser tan plena que las palabras sean solo mero formalismo para el observador imparcial.
7.- Debe ser astuto con el cuerpo, el corazón y la mente, diferenciar la postura en cada situación, por analítica, jocosa, insignificante, precoz, objetiva, boba o filosófica que parezca.
8.- No me gustaría enamorarme de un tonto (jajaja, un idiota, por lo menos), quisiera a alguien que se hace el tonto cada que ando de mal humor, que me aguante por lo que soy y por lo que puedo llegar a ser, por la bebida y por el honor, por los besos y la lujuria…
9.- Quiero que me diga cuando esta cansado de mí, sin rodeos, que me conozca a tal extremo que me lastime sin hacerme demasiado daño. Quiero que el último capitulo de nuestras vidas sea el más espectacular de nuestra vida en común.
10.- Quiero que por último, cuando lo vea en brazos de otra mujer, sea capaz de mirarme a los ojos y decirme lo bien que la pasamos. Que sea mi amigo aún cuando no lo seamos.

Requisitos fisicos.
Manos grandes.
Barba.
Cabello semi largo.
Ojos tristes (opcional).
Mueca canalla.
Labios delgados.
Medir más que yo (1.65… cualquiera, jaja)
Bohemio.
Justo como quien?

Obvio, esto fue un debraye en todo sentido de la palabra.
Creo que mi hombre perfecto en este momento esta esperando a la mujer perfecta (lo cual me entristece mucho) por que no soy yo.
De cualquier modo es fantastico creer que la cuerda esta echada y que con cosas tan simples uno puede sentirse más solo.
La soledad siempre es mecanica. No se elije.
Ay, la verdad esque escribi todas estas babosadas porque ando muy triste. Eso me provoca ser patetica y practica. La verdadera razón esque el grial esta lejos y no me toca beberlo. Quisiera que me pasará algo verdaderamente extraordinario. Estoy sola y eso siempre es una cosa para ponerse medio sentimental. En algún lugar de mi subconsciente uno se pone digno, cierra la puerta a todo. Las oportunidades son para la gente hermosa y yo francamente estoy cansada, sin ganas de luchar por nada ni por nadie. El que alguna vez fuera el amor de mi vida ha ido diluyendose en una alícuota tal que a este paso muy pronto el recuerdo de mi desventura por él hara que se lo cuente a mis sobrinos a mis 45 años. No quisiera ser la tía amargada que se quedo pa vestir santos, pero a estas alturas “hermana brincada, hermana quedada”. No hay poesía en ninguna de las notas alegoricas de mi sonata de invierno. Quisiera que esto no sonara a un grito desesperado o a un anuncio clasificado, sino más bien como una nota resignada para futuras técnicas de aprendizaje. Lamentablemente uno siempre busca (para no engañar al espectador) que salga alguien entre toda la multitud errante, para concederme un deseo fugaz y que aminore un poco esta carga (siempre la compartida es la menos pesada), si tan solo supera lo que es amar… Amar es un capricho que los lujos y los desdenes no han tocado de verdad. Es una palabra mezquina y en verdad belicosa, pero siempre es lindo recordar o tener a alguien en el pensamiento. Y yo por supuesto me aferro a ese Cid Campeador que apabulla mis entrañas. No creo que él se acuerde de mí. Soy muy olvidable. El problema esque siento demasiado todo lo que me rodea. Si las cosas estuvieran en su pleno orden lleno de aspostasía, creeme, no estaría escribiendo cada marrada. A veces me gustaría que Javier Rojas P. leyera mi espacio. Nada más para que se enterara y no fuera la única destrozada en esta marejada de puteadas. La cosa es que no va así. Mis amigos los veo cada vez más lejanos. Nunca los tuve y ahora que los tengo creo que no están cuando de veras me esta cargando la chingada.
^Poniéndome un poco más dramática (a lo pendejo) quisiera no estar a estas horas pensando en Armando Glez. O en Pedro, Iván, Ese chico de 6º que se parecía a Paul McC, Emmanuel Glez., Marco A. Cruz Arredondo, mi maestro de teatro Marco Vidal, El ilustre, El barrendero, Oscar Buendía Toriz, Walter Ortiz, Jonathan Rojas Blancas, Daniel Martínez, El de carita pálida, Mauro Arrieta, Julián Torres Bernal, El chico de la casa verde, Alejandro, Ricardo Mungia, Edgar Torres, Isaias Quintero, Gerardo el que me enseño a tocar guitarra, Mi chico cine “Toño”, Eusebio Ruvalcaba, José Quintero, Roberto …y quisiera acordarme de más, me llegan como una marejada de recuerdos vagos… cómo sea, a nadie le importa llevar la cuenta… por lo menos los besos nunca fueron suficientes, el sexo (uf, ni se diga)…

A todo esto, me pregunto si vivir valdra la pena. Vale acaso perder un segundo de mi tiempo esperando a que el reloj deje de sonar. Basta con que dejes la almohada, pasa, te sientes cómodo?

Un principio agonizado.

No, NO SIEMPOE HAY Q ESPERAR A QUE LAS FECHAS SE RENUEVEN. O Q LOS CICLOS SE UNAmn.



No siempre hay q esperar a que las fechas lleguen en un circulo vicioso.

Espera y veras como me siento des`pués de q te vea....
No hay sinceridad en nuestro encuentro.
La palidez, los rezagos, un reclamos callado.
Me gustaría

Cuando estoy sintiendome tan mal, la televisión no ayuda mucho.
Creo, estoy convencida, de q las cosas pueden ser diferentes si tu me explicas el mecanismo defensivo de tu desprecio.
Ok. No hay dobles sentidos.

Sinceramente hay cosas q no quiero esperar de ti.
Una palabra calurosa.
Una di
No se lo que me pasa. Siguen esas voces aun despues de cerrar los ojos.
Antes solian desaparecer en cuanto me tapaba los oidos, pero ahora se han vuelto mas agresivas.
Mi histeria terminará por matarme. Perdoname si te escribo esto en una nota con letra tan apretada.
Es tanto lo que quiero decir, mi cabeza se esta llenando de absurdas ideas. Me siento mal. Me siento cada día peor.
Soy una carga constante para tí. Siempre has sido tan comprensivo pero creo q como voy, terminarás hartandote.
Me siento tan culpable y a la vez tan confundida. Si, la confusión se debe a mis estados latentes. Quisiera q no fuera así.
Siguen las voces. Estoy histerica. Mis manos sudan. Mi respiración es la de una loca. Ni siquiera puedo respirar con un ritmo eficiente.
Mi corazón esta al borde del colapso. Quisiera q la muerte no fuera tan trágica. Pero no me culpes por querer salvarte.
Por querer salvarnos.
A estas horas de la mañana ya me he fumado 3 cajetillas completas. Ni siquiera sabía si estaba haciendolo.
Por enesima vez quiero dejarlo en esta semana. Soy una satira completa, lo notaste?.
Lo hago de manera tan automatizada. Mi espalda me duele.
Mi cuerpo estaba tan drogado por la cantidad de farmacos q me dío el psiquiatra.
Pero deje de tomarlas desde hace 3 meses porque si no simplemente terminaría automata.
Mis ideas no fluyen con nitidez cuando estoy idiotizada. Pude terminar la novela. Pero desde hace unos dias siguen las voces.
Se han vuelto más rígidas... exigentes. Siempre estan pidiendome q te deje ir. Q estaremos mejor así.
Yo les digo q sin ti no puedo vivir, pero tampoco podremos vivir juntos con mis estado deprorables.
Quisiera escribir y... por momentos me dejan hacerlo.
Creí q había perdido esa cualidad. Pero ahora estuve tan inspirada que estos fantasmas casi me parecían cosa del pasado.
No se si lo hacen para saber hasta donde puedo llegar (juegan conmigo, aniquilan mi estado de ánimo, permiten q me confie),
o si de pronto son tan cinicas para esperar a que me tranquilice y comenzar desde el principio a agonizarme.

La demencia es un mal con el que viviremos por siempre

Es tan fácil estar demente. O fingir demencia.

Es tan fácil tomar la salida próxima al loquero declarándose incapaz de seguir en pie.

Siempre he librado una batalla atroz al fingir que estoy cuerda. No tendría porque hacerlo, pero creo q vale la pena esperar a q tome la iniciativa.

Últimamente el elogio a la locura me esta corroyendo. Decidí el camino atroz: fingirme cuerda. No estoy bien. Nada bien.

Creo, q… estoy enloqueciendo verdaderamente. No dejo de hablar sola por todos lados. Tengo un puto mal humor espantoso. Detesto sentirme con esta parte tan derrotista. Es una incapacidad. Es un drama ocultista. Es todo eso y nada a la vez. La tristeza me hace tocar estas melancólicas notas. Soñé, sueño, ando con tus ojos inexistentes en la mente y tus labios mentirosos, Ver crecer, madurar y morir. El abismo del que dirán. Cuando amanece.
Estoy cansada de decir lo q me pasa. También estoy cansada de ocultarlo.
Algo me esta comiendo por dentro. Avanza de manera silenciosa y arrasa mis pensamientos más nobles. Me vulnera, me hipnotiza y me corroe poco a poco, sin tregua aparente. Me esta devorando, es un fantasma tan terrible
Me estoy volviendo loca
Me siento perseguida por mis fantasmas los recuerdos. Me vienes a la mente en horas capicúas. Me vienes y te vas dejándome indefensa. Hoy, la fecha me gasta bromas pesadas. Son tan frágiles mis defensas, mis eternas dolencias de 3 años. No pude salvar al amor… No pude. Soy incompetente. No solo es eso. Como q todo a mi alrededor esta por derrumbarse
No me situó en algún lugar. Me siento ajena a todos los momentos que piso... parezco gato encerrado en un lugar diminuto; quisiera correr... ¿pero a donde?
¿Con quien? ¿Como??
Escucho voces... y creo q me estoy perdiendo otra vez... ¿q me pasa?
Estoy tan rara y en orbita distinta... pero, de repente... Me doy cuenta de la gravedad del asunto. Concluyo: No estoy bien
Algo en mi cabeza esta fallando, se esta quebrando, se rompe en mil piezas... me hace falta una cosa, ¿alguien me dice que es?...
Deberían legalizar el prozac... te juro q aunque me siento tan triste y no evita q me pierda en el enfado... estoy tan enojada. Hoy no soy Alejandra. He dejado de serlo para convertirme en un ser ambiguo y amargado, simbólicamente perdido en la miseria de su propia carencia. Después de la rabia existe un susto terrible por los seres y por las ideas
Ni en mi adolescencia perturbada tenía tanta incertidumbre

cuando estas, medio estas o no estas.

Cuando estas:
No te pasa amor?
No te pasa q tienes ganas de mandarlo todo al carjo cuanto te levantas por las mañanas.
El cielo esta tan cambiado. El pronostico del clima anuncia 28 grados máximo al medio día, pero a las 7 de la mañana sigue lloviendo.
No quisiera levantarme.
No quisiera separarme de tu escencia, de tu olor, de tu calor por las mañanas.
No quiero perderte de vista por hoy. Quisiera seguir abrasada a ti, comerte si fuera necesario para llevar un trozo en el estomago a todas partes. Quiero seguir escuchando q me mientes al oido.

Cuando no estas
No puedo. Siento esa pesadez al ver el despertador.
Mi lado de la cama esta vacío. Me faltas (quién eres y porque me faltas??)
Hace tanto tiempo q te estoy esperando. Espero con la desesperanza de nuevas reliquias involuntarias, con la certeza de q la fé me es incompresible.

Cuando ya te fuiste:
No puedo dejar de pensar en ti cada puto segundo.
No quiero dejar de pensar en ti cada puto segundo.
No estoy lista para dejar de extrañarte a cada segundo.
Me pregunto si me escuchas. Si me lees, si me oyes gritarle al viento q te amo y q no quiero olvidar lo q siento por ti.
Es tan absurdo de creer?
Es acaso tan simple mi razonamiento?
No quiero dejar que pases por mi vida de manera tan efimera sin q tenga las respuestas adecuadas.
El planteamiento siempre fue el mismo:
Por q yo y por q yo no?
Por q?

Todavía me hablan de ti y me dueles. Me dueles donde creí q ya era pasado.
Me suenas a rocas en un río turbulento, en un deslave arcaico.
Estas ahí para saber q existi?
Creo q no te acuerdas ni de mi nombre…
…Yo si me acuerdo del tuyo, entero… por entero.

Poqu ella te provoca esa sed de amor y yo no?
Que diablos tiene ella q no tengo yo?
No soy bonita (eso ya lo sé):
No soy intensa (eso ya me lo dijiste)
Dime un defecto y yo lo tengo (con eso convivo a diario)
Pero entonces es un crimen no ser tan vulgar?
En q momento las raras como yo no te interesaron?
Por q me hiciste caso en primer lugar?
Me hubieras dejado con la incertidumbre…
Pero no, m diste vino agonico, una esperanza truncada, miles de ilusiones en una,
Para q’?
Como para q?

Ya no me puedo enamorar.
Ya nadie se enamora de mi.
Te llevaste mucho más de lo q deberías.
Me cagaste la vida.
Por un lado, q bueno, asi esta bien.
Por otro, q poca tienes, porque nunca me dijiste en q falle.


Migajitas de afecto para un corazón libre.
Ojitos de ilusión,. Un doblete de nada.
Loteria de vida, un envse de promesas inconclusas,
El vino de mi ilusión q juega con tu esperanza descalsa.

Un especialista en deseo...

Como siempre, Eva avanza hacia mí para robarme un beso. No la culpo, pero la gente sigue mirándonos como un par de lesbianas sin madre.
No siempre fue así. Yo disfrutaba mucho del sexo con varones hasta que apareció en mi vida uno y me jodió la existencia. Manuel siempre fue el mismo patán de hermosa calaña, siempre dispuesto a mandar y yo a obedecer. Un buen día la conocí a ella y fue el fin de mis fantasías con el sexo opuesto.
¿Como explicarlo? Todo fue tan repentino. Siempre he valorado las miradas. Ella siempre observa todo con los ojos más sensuales que sexy. A veces me pregunto si es lo correcto vivir un mundo seducido por los placeres menos elementales. Flores, preguntas, cuestiones poco diplomáticas, sexo con amor, palabras dichas y aquellas que se describen por una vertiente cautelosa y frívola.
Me gusta. Me encanta. Y es deseo el que complementa mi poca objetividad. Ya tanto tiempo. Una ciencia retrograda que toma un aspecto más minimalista y complejo. A todo esto, un beso no le hace daño a nadie. Los privados solo se dan en casa.
Llorar siempre hace que me sienta un poco mejor. Le confieso a mis adentros que no estoy tan feliz viviendo en el otro lado de la acera. Paúl vino a verme para tener sexo. Yo acepte, siempre lo hago cuando es bueno desde la perspectiva ética. Pero ella no quiere perdonarme. Me dijo zorra. Las perras son mujeres sin corazón, le respondo, siempre están dispuestas a coger por poco, pero yo no lo hago por diversión, mi necesidad es muy grande. Me mira. Yo lo sé. Esta decepcionada. Si no te amara tanto, susurra. No me amas, grito, el amor no es así de egoísta. Y como madres voy a saber de amor si con Josué nunca aprendí el valor de querer incondicional. Que fresa te oyes, murmura riéndose con sarcasmo. Soy fresa, aunque te purgue. ¿No, si yo solo decía, no puedo pensar en voz alta sin que me critiques? Basta, no tolero, me largo, yo solo soy lesbiana porque era divertido, me emputan las viejas pendejas que no entienden de cosas tan sencillas. Largo, al fin que ni quería entenderte.
A todo esto, las discusiones siempre me gustan porque terminamos en la cama. Digo, ¿habrá acaso un proceso para mi nivel de excitación y llegar a esos puntos de libido por la fuerza? Ni idea. Su piel es tan suave. Sus manos tan tersas. Siempre he valorado por muchas razones al sexo femenino. El masculino no es tan agradable a los sentidos. Deposito mi cara en el nacimiento de sus senos. No soy lesbiana, pero aparento. Recuerdo con nostalgia mi adolescencia. Una mari macha de poca monta. Todo pelo, poca suavidad. Que asco me daba mirarme al espejo en esos días.. Me pregunto si mi aspecto loboide la atrajo hacia mí. Alzo la cara y la miro, ella respira muy lento. Es tan linda. ¿Por qué yo y no otra? Porque me gusta tu vello facial. Ambas reímos, es tan agradable sentir la risa de la otra tan cerca. Me hubiera gustado ser una chica como tu… ¿A que te refieres? A que eres tan femenina, tan bella, terriblemente hermosa. ¿En serio crees que soy hermosa?
No puedo creerlo. En verdad que no puedo creer que desconfié de su belleza tan clásica. ¿Cómo es posible que una mujer que podría tener al imbécil que quiera este conmigo por un temor absurdo a no sentirse amada? No puedo evitarlo, sigo mirándola con la boca abierta. Ella se siente aludida, mira para otro lado, esta cansada de esas insinuaciones. He tenido sexo desde que tengo memoria; lo he tenido con chicos, grandes, medianos; todos me desean como un objeto, pero tu… cada que me miras me atrapas, me haces sentir y me acaricias con la habilidad de una verdadera seductora, creo... que me estoy enamorando de ti…
Sigo sin entenderla. A penas me dijo esas palabras fatídicas y simplemente tome la iniciativa de largarme lo más pronto posible del lugar. Soy una cobarde malísima. Mi temor es solo comparable con un asesinato serial. Alejarme del lugar del crimen. Escurrirme entre las coladeras permanentes del deseo. Sigo sin entender que me vio.
Ahora estoy en casa, sola, recorriendo las palabras dichas en mi cabeza y analizando cada detalle para que no se me escape. Él me llama por teléfono por quinta vez. El contestador corre con una frase de Oscar Wilde. No dice nada, sólo escucho su respiración suave y entonada. Sé que es él. Sé que tiene ganas de coger conmigo hoy. Pero eso no es motivo suficiente para justificar que no hablamos ni por un maldito aparato. Su esposa debe estar ansiosa por retorcerme el cuello. Ansiosa por tenerme de frente y jalarme el cabello y humillarme en público. Sé que ella lo sabe, sé que mi novia lo sabe, se que todos lo sabemos pero preferimos hacernos los tontos antes de afrontar la sorpresiva coyuntura. Espero q no. Espero q todo sea producto de una histeria perniciosa.
Se aleja, poco a poco. La cama es muy grande, las sabanas son corrientes y en el fondo música de Ella Fitzgerald. No tengo otro motivo para coger con él. Coger es un placer y el sexo sin amor se me da muy bien. Quisiera que me descubriera en este mismo instante, que supiera que estoy con otra persona para que sea ella la que me mande a botadero y yo no tenga que desgastarme devanándome los sesos en una salida poco fácil. No quiero sentirme obligada a volver. Sé que si ella me descubre, ya no habrá marcha atrás. Ya no pediremos perdón ninguna de las partes. Ambas somos orgullosas y terriblemente entupidas.
Me pidió que me casara con el. Los trámites están casi listos para que se separe de su mujer. No le pido nada, ni siquiera le exijo nada, pero se ve presionado. Insiste en que espere, pero no deja de preguntarme si sigo con esa mujer. Le digo que sí. Que estoy muy bien y que es mi mejor amiga. Él sabe que miento. Mentir es un arte. Es lo mejor que una mujer puede usar como accesorio seductor sin tener que desvestirse. Lamentablemente es demasiado perceptivo y yo demasiado torpe en la intuición. Las mujeres desarrollaron cosas que aún me suelen ser desconocidas y él las domina como un experto. Chantaje me viene a la mente. ¿No la vas a dejar? Me pregunta. No, es mi respuesta definitiva. Un portazo que suena a despedida. Que teatrero.
Ella insiste en que algo me pasa. Nada. No es nada. ¿Hay alguien más? ¿Y si lo hubiera que? Aun no es ilegal el concubinato entre mujeres (un harén de mujeres para una lesbiana aun no es mal visto por la ley, ¿o si?). Soy una hija de puta.
Estoy tan aburrida. No hay un contacto que me haga sentirme plena. Creo que me he vuelto frígida. Pero no, para que sigo peleándome con mi yo congnocitivo. A lo mejor es algo menos indecente, creo que hay algo en mi cabeza que no anda para nada bien y un acostón con un fulano no me vendría nada mal. Coger por coger. Una opción políticamente maravillosa.
Por ultimo, el capitulo final se acerca. Me vio y no dijo nada. Llegue a casa, me vio salir de la mano de él. Me vio besarlo, quise que lo viera. No quería que pensara que era producto de su imaginación. Pero al volver a casa… ¡nada! Absolutamente nada. Me acuesto con descaro en la recamara. Me levanto la blusa y dejo ver mis senos llenos de marcas sexuales. Sigue sin decir nada. Quiero café. Me levanto de un puto mal humor. Entonces, de la nada aparece en el quicio de la puerta y me pregunta si tengo frío. Me recargo en el referí. Sigo al punto del colapso, de la histeria. Quiero terminar, conocí a otra, suelta por fin. Me reí. En verdad, suelto la carcajada. Es un alivio y sin embargo, ¿Porque me siento traicionada? Se llama “XY4”, la conocí hace dos meses. Ah. Muy bien. ¿Quieres hablar? No, quiero dormir. Me voy. OK. Mañana mismo. Ok. ¿No te molesta? Si, pero ya qué. Espero que te vaya muy bien. Lo sé. Suerte en todo lo que hagas. Igual tú. Oye. ¿Qué? ¿Se llama R tu nuevo amor? ¿Por? Curiosidad, eso es todo. Si. Ah. Ok… oye… no era mi intención cagarla. No, para nada. Oye… ¿Qué? Quiero que seas feliz y que encuentres lo que estas buscando. Muchas gracias. Por cierto, el sexo siempre fue una mierda… ¿En serio? No te lo dije porque yo te quería a ti, no a lo que me ofrecías. Ah. Descansa.
Y es así, como esa cara preciosa me dejo para seguir con mis dudas, con mi vida, con mi triste caca en la cabeza. Después de todo, sé que lo hizo para no hacerme sentir culpable. Y eso, por supuesto, que se agradece.